De Vírgenes,verdugos y poetas


De Vírgenes, Verdugos y Poetas
De Jesús Serrano Garijo


                                                                 Lo primero que me gustaría destacar de este libro es su carácter didáctico, su afán pedagógico, pero nada elitista en su lenguaje lo que lo hace accesible a cualquier persona interesada en la poesía o en la literatura en general, porque nos ofrece un amplio registro de datos y documentación, empezando en el siglo IV en plena época romana y terminando en el siglo XX en la llamada Generación del 27, en la que está incluido el poeta que nos ocupa, Federico García Lorca. Aunque ya iremos viendo que dicha generación de escritores puede considerase ecléctica ya que sus componentes trabajaron desde diferentes campos estéticos y lingüísticos, desde el academicismo del que era acusado Juan Ramón Jiménez, al acercamiento más rompedor y vanguardista de F. G. Lorca a la historia y al folclore.
Encontraremos información nueva sobre García Lorca porque, a pesar de ser uno de nuestros poetas más conocidos, se aportan en este libro datos importantes a cerca de su vida y de su obra. Nos invita Jesús a un análisis pausado del poema de Olalla, a través del cual iremos conociendo a un tiempo las claves del poema y a su autor, en toda su amplitud y complejidad.

Se asemeja el poema, según mi opinión, a esos cuadros del Bosco o del Greco, llenos de mensajes ocultos esperando ser descifrados. De ahí lo interesante de la lectura de este libro, porque nos ayuda a ir desvelando todo ese lenguaje cifrado, que servía a los autores, bien para escapar a la intransigencia de los poderes fácticos en cada momento, bien para expresar o reinventar viejos mitos alimentados a veces por tradición y a veces por conveniencia.

Un lenguaje en clave entre el escritor, el poeta en este caso, y el lector. La labor de investigación que se realiza en Vírgenes, Verdugos y Poetas, nos ayuda a vislumbrar los simbolismos del poema, sus fundamentos ocultos, al tiempo que llegamos a un conocimiento del poeta en toda su amplitud. Esta labor de investigación, amplísima no hay mas que echar un vistazo a bibliografía que Jesús Serrano ha utilizado y la labor de trabajo de campo que ha realizado. Se han consultado archivos de diferentes lugares, por citar algunos que se citan en el libro, el archivo del monasterio de la cartuja en Granada, o los de la biblioteca nacional en Madrid. Rastreando la pista del mito y del poeta.

Así conoceremos el interés de Lorca por la antigüedad y los poetas grecolatinos (no podemos olvidar que nos encontramos ante un poeta culto que además defiende esta posición); así como su amplio conocimiento de la historia e idiosincrasia andaluza: la conquista romana, el cristianismo primitivo, la judaización, la posterior islamización y la imposición de la cristiandad; trasladándonos al germen mismo de aquel cristianismo pretérito en Andalucía, con varias corrientes en confrontación en época tardo romana, tales como los donatistas (seguidores de Donato) y los montanistas (acólitos de Montano). Son estas diferentes sectas cristianas, el germen del Cristianismo posterior que utilizará a los mártires en un doble sentido: de justicia divina, a través del castigo por supuestas herejías, pero a su vez utilizando al mártir como refuerzo de la causa ortodoxa y oficial. Por ejemplo, la secta de Montano defendía la búsqueda del martirio como medio para alcanzar el cielo, como ejemplarizó en especial una de sus mártires: Priscila.

Surge en este contexto el primer poema del que tenemos constancia sobre el martirio de Santa Eulalia, himno que se sitúa en Mérida (Augusta Emérita), la capital de la Hispania romana. Su autor, Prudencio, retrata a una mártir púber de 12 años y sitúa su muerte en el año 303. Tiempo en el que el paganismo predominaba en Hispania. Aunque el cristianismo y sus diferentes sectas ya contaba con muchos e influyentes adeptos.

Nos acercamos también al Cristianismo sui generis de F.G.L. que es educado en la fe de Cristo pero que, lógicamente, la cuestiona desde su intelectualidad. Seguramente Lorca conocería los orígenes mistéricos y paganos del cristianismo, entre los que me gustaría destacar por su coincidencia sorprendente los de las religiones mistéricas de la Magna mater, Isis y sobre todo Mithras, que como Jesucristo nacía un 25 de Diciembre, de una virgen y cuyos devotos se bautizaban inicialmente con agua. Este sincretismo religioso se hace patente en el poema en versos como “Medio monte de Minervas, abre sus brazos sin hojas” o
Flora desnuda se sube por escalinatas de agua
Es posible que, según argumenta Jesús Serrano, el interés de Federico por la Santa llegara a través de su madre, natural de Totana, ciudad que , como Mérida, tiene como patrona a Santa Eulalia. O también a través de una criada, su propia ama de cría Dolores, La Colorina, muy devota de las ánimas. Se hace referencia también a un cuadro que había en su casa, con mujeres desnudas ardiendo en el purgatorio, posible origen de los versos 41 y 42 del poema de Lorca.

Mil arbolillos de sangre
le cubren toda la espalda
y oponen húmedos troncos
al bisturí de las llamas.

El libro que nos ocupa se divide en dos bloques bien diferenciados: El primero, Eulalia Virgen y Mártir, que nos sitúa en el contexto histórico del surgimiento del mito, en la época romana, y nos habla del himno a Eulalia del poeta Prudencio. Además de los diferentes himnos y poemas que se han dedicado a la Santa en las posteriores épocas.

Y la segunda parte, La gitana Olalla, en la que nos adentramos en la trayectoria de Federico como escritor y poeta, sus orígenes, su formación, sus proyectos y colaboraciones y su propio posicionamiento en el mundo literario.

Me voy a detener aquí en un par de aspectos interesantes desde mi punto de vista; por un lado la búsqueda y el encuentro de Federico con sus raíces, se recogen en el libro unos cuantos testimonios al respecto, en primer lugar su interés por el pueblo gitano, que él justifica de alguna manera con estas palabras (página 137): “Yo creo que el ser de Granada me inclina a la comprensión de los perseguidos, del gitano, del negro, del judío, del morisco, que todos llevamos dentro”; apuntando con estas palabras el profundo mestizaje de Andalucía y reivindicando de una forma muy elegante una parte importante de nuestra cultura, relegada e intencionadamente olvidada. En palabras de Jesús S. (página 149).
Una prueba más de su compromiso con la cultura andaluza y de sus orígenes, es su participación junto a Manuel Ángeles Ortiz y Manuel de Falla en la preparación del primer Certamen de cante Jondo en Granada, patio de los Aljibes de la Alhambra. (Año 1922).

Y por otra parte su fuerte convicción de que la cultura andaluza debe huir del sambenito de charanga y pandereta ya mencionada por don Antonio Machado. Dice Lorca al respecto (página 144).Me viene aquí a la memoria a cuento de estas palabras las que recoge Blas Infante en el himno de Andalucía” los andaluces queremos volver a ser lo que fuimos….” y otros tantos intelectuales escritores y poetas coetáneos de Lorca y con innumerables coincidencias de pensamiento, por nombrar alguno María Zambrano, ensayista y poeta, natural de Vélez Málaga.
Y todos los compañeros de generación como Luis Cernuda, M, Altolaguirre y tantos otros que dan muestra de la profunda convulsión intelectual que había en España en esos momentos. El fuerte compromiso de la mayoría de estos intelectuales y su lucha por la libertad con mayúsculas, incluso al margen de encasillamientos políticos. Libres para interpretar y contar la historia, como muestra Lorca en su romancero, en el que juega con personas y personajes, el de la propia Santa Olalla a la que convierte en gitana como símbolo de los perseguidos por la intransigencia ya sea religiosa, cultural o política.
Todo el Romancero en conjunto, pero especialmente el Martirio de Santa Olalla resumen el posicionamiento de Lorca , convencido del mestizaje de Andalucía de su riqueza cultural ,como fruto de ese mestizaje y de la defensa sin complejos de la historia de Andalucía al margen de invenciones oficiales. Y como proyección ante el mundo, porque la lucha por la libertad y la dignidad humana es universal.


                                                                        Begoña.R.J


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